De repente, huele a primavera, el sol nos acompaña en el último fragor del invierno, el piar de los pájaros empieza a ser una constante en las mañanas, y el campo empieza a llenarse de colores. El reloj de la vida se ha puesto en marcha, y con él las ganas de disfrutar de la naturaleza, el deseo de salir a la calle y dejar que nos bañe la luz del sol.
Dendrobium Phalaenopsis |
Por supuesto, mis flores no podían ser menos, y han salido de su recogimiento invernal en el hogar, para darse un baño de energía natural en la mañana. Así de espléndida se mostraban un rato después…
Dendrobium Phalaenopsis |
Sólo nos hace falta pequeños indicios que nos hagan palpar la inminencia del cambio, y tan rápido como un haz de luz, todo se ve de una forma diferente y se nota en todos los rincones las ganas de afrontar los retos con energías renovadas. Salimos del letargo del invierno con deseo de iniciar nuevos proyectos y desarrollar lo que permanecía latente. Por eso, aunque aún queda… BIENVENIDA, PRIMAVERA!
¡la primavera está en tí! gracias por adelantármela cada día...
ResponderEliminarLa primavera esta en todas partes, hasta en los bichilos lanudos que crecen por todas partes... Estoy ultimando su aparición estelar.
ResponderEliminarQue yo sepa el Corte Inglés no le ha dado la bienvenida a la Primavera!!! Has tenido la osadía de adelantarte a Isidoro Álvarez!! Cómo dice la de la secta (¿la de la sexta?) a los que estamos a tu alrededor nos haces vivir en la constante primavera. I love you, baby...
ResponderEliminarTitirra, las fotos cada vez mejores.
ResponderEliminarJajajajajaja, me ha encantado lo del corte ingles, no lo había pensado, jajaja... Mi primavera sois vosotros, que me hacéis sentir muy afortunada. Si no estuvierais a mi lado no sentiría esta primavera tan temprana.
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